5.2 Estructura urbana

Las ciudades no son núcleos homogéneos, sino que está compuesta por diferentes áreas, paisajes, que reflejan usos del suelo diferenciados, en ocasiones bien definidos, en otras mezclados. La distribución espacial de estas áreas configura una determinada estructura urbana. Esta estructura se verá reflejada en el plano urbano tal y como vimos anteriormente. La mayor o menos heterogeneidad interna de una ciudad dependerá del período en el que se formaron ya que la ciudad así como sus diversos sectores internos, evolucionan con el tiempo y algunos sectores cambian de uso en dicha evolución. 

Los principales sectores que podemos diferenciar en toda ciudad son:

1. Área central: el centro de las ciudades constituye un espacio de gran complejidad por su variedad de funciones, contrastes morfológicos, importancia patrimonial y valor cultural y social. Dentro de esta complejidad, en todas las ciudades se distingue el centro histórico y un centro de actividad o CBD.

a) Centro o casco histórico:  Los centros históricos pueden considerarse como los lugares más simbólicos, apreciados, distintivos de las ciudades. Son los espacios que dotan a éstas de un carácter singular, y que las diferencia de las demás ciudades. Son lugares donde existen, la mayoría de las veces, monumentos históricos, conjuntos arquitectónicos y edificaciones simbólicas. El centro  histórico representa la memoria colectiva de la ciudad. En él se aprecian los vestigios del urbanismo de diferentes épocas y arquitecturas de distintos estilos, en definitiva, muestra la historia de la ciudad; por eso tienen un valor educativo y atraen el interés de viajeros y turistas. Es la ciudad heredada que decíamos en apartados anteriores.  Por otra parte, los centros históricos encierran valores de convivencia para el conjunto de los ciudadanos. Sus calles y plazas son lugares de paseo y de encuentro, son espacios de diversidad y mezcla funcional que propician las relaciones sociales. Todos estos hechos hacen de los centros históricos los espacios sociales físicos de más valor y de mayor complejidad de la ciudad. Sin embargo, recientemente, estos centros históricos se han visto afectados por procesos urbanísticos que están alterando su esencial primigenia. Algunos de las funciones tradicionales que albergaba el casco histórico, como la comercial o industrial, se han desplazado hacia la periferia, dejando importantes áreas sin uso y produciéndose una degradación de dichos espacios. Esa degradación afecta también a la calidad de vida y de la seguridad. A esto hay que añadir los problemas de tráfico que suelen darse en estos espacios de complicado trazado. Esto ha provocado que la opinión de los habitantes sobre los centros históricos se
haya vuelto más negativa, así como los procesos de degradación de estos lugares hacen que los centros históricos ya no sean un lugar tan atractivo para vivir. Todo esto lleva a que poco a poco el centro empiece a estar habitado mayoritariamente por grupos no productivos, de
rentas bajas y escaso poder económico como inmigrantes, población envejecida, etc., que además requieren atenciones sociales y equipamientos, como hogares de ancianos, comedores sociales y centros asistenciales. Las pirámides de edades de estas áreas presentan un creciente envejecimiento, la proporción de niños acaba siendo muy pequeña en el centro. De ese modo los equipos y las infraestructuras resultan inadecuadas: sobran colegios que hay que cerrar o reconvertir funcionalmente y faltan residencias y servicios para atender las
necesidades de los ancianos. En algunas ciudades se ha procedido a procesos de recuperación del casco antiguo, remodelando áreas degradadas y promoviendo proyectos de gentrificación o rehabilitación de edificios que son ocupados por personas de alto poder adquisitivo o turistas, que provoca un incremento del precio de la vivienda y un desplazamiento de los vecinos originarios. Esto repercute en una creciente pérdida de la esencia de estos espacios emblemáticos de la ciudad que, en muchos casos, quedan convertidos en parques temáticos.

Figura 89. Vista aérea del casco histórico de Córdoba	Figura 90. Rehabilitación de un edificio. Proceso de gentrificación

b) El C.B.D. (Central Business District). Históricamente, las ciudades desarrollaron un área central dónde se concentraban los poderes religiosos, políticos y económicos, En la actualidad los C.B.D. son los centros económicos y financieros de la ciudad. Tienen en común una alta densidad de empleos y de actividad, albergan el mayor número de oficinas, grandes comercios y centros administrativos de la ciudad, así como el porcentaje más elevado de las sedes de las firmas financieras y de negocios. También suelen albergar instalaciones municipales o gubernamentales. Presentan un gran accesibilidad, confluyendo diversas líneas de transporte. En estos espacios se produce una fuerte competencia por el suelo, que hace que los edificios se sean cada vez de mayor altura y de precio elevado, por lo que apenas se usan como espacios residenciales. Debido a esto, suele aparecer prácticamente desiertos por la noche. En la actualidad, gracias a la telemática, algunas sedes de empresas se trasladan fuera de las ciudades en donde el precio del suelo es más barato. En algunas grandes ciudades, como Tokio, Nueva York o Londres, su C.B.D. tiene distintas áreas especializadas dentro del mismo: comerciales, de finanzas, administrativas, de ocio y entretenimiento etc. El dinamismo y el cambio son constantes en esta parte de la ciudad, su localización puede haber variado con el paso del tiempo; así en la ciudad de Madrid el C.B.D. ha ido desplazándose desde el antiguo centro histórico (Puerta del Sol-Calle de Alcalá) hacia la nueva zona de negocios situada a lo largo del Paseo de La Castellana (Cibeles-Azca).

Figura 91, CBD. a9 Los Ángeles. b) Nueva York

2. Zonas industriales. Las ciudades han sido desde la Revolución Industrial áreas de atracción de la industria, tal y como veremos en el capítulo dedicado al sector secundario. Factores como la cercanía a un importante mercado potencial, la abundancia de mano de obra, existencia de economías de escala, existencia de fuentes de energía, medios de transporte de alta capacidad como carreteras o ferrocarril, etc., explican esta localización. en fechas mas cercanas, se planificaron zonas industriales determinadas, construyéndose zonas industriales o también polígonos industriales de diversa entidad y alcance. En la actualidad, los patrones de localización de la industria en la ciudad han cambiado con el paso del tiempo. Desde mediados del siglo XX la industria ha ido abandonando la ciudad central desplazándose hacia las afueras, en los que el precio del suelo es más barato y en dónde los inconvenientes para el desarrollo de la actividad industrial son menores. Se ha ido implementando políticas urbanas de  descentralización industrial que han producido que la industria se sitúe en los municipios periféricos de la ciudad central en polígonos industriales con mayores facilidades para obtener ese suelo abundante y barato necesario. En la ciudad central apenas quedan pequeñas industrias y talleres, generalmente, de alto valor añadido (joyería, por ejemplo). 

Las industrias más contaminantes también ha ido desplazándose de las ciudades e in luso de los países occidentales, deslocalizándose hacia países en los que la presión social es menor o las condiciones medioambientales son menos exigentes y la mano de obra más barata. Esto ha originado que se abandonen amplias áreas industriales que, en algunos casos, se ha podido reconvertir en áreas residencias o comerciales. Por otro lado, han ido apareciendo nuevos polígonos industriales dedicados a las nuevas tecnologías (parques tecnológicos) dedicados a sectores muy tecnificados, investigación y que mantienen estrechas relaciones con las universidades y centros de investigación científica, empresas de nueva creación, para facilitar la realización de programas I+D. son polígonos que precisan buenas conexiones, carreteras y aeropuertos para garantizar unas buenas comunicaciones. El modelo más desarrollado es el Silycon Valley en California.  En España comenzaron a instalarse en 1985, cuando el Gobierno regional de Madrid creó un polígono industrial de tecnologías avanzadas en Tres Cantos. A partir de aquí el resto de los parques tecnológicos se han localizado en ejes de desarrollo económico, en las áreas metropolitanas de mayor crecimiento (Vallès, Zamudio, Málaga, Paterna) o próximos a núcleos urbanos de más de 100.000 habitantes que tienen un tejido industrial que pretenden impulsar (Valladolid, Asturias, Orense). La instalación de estos parques tiene una importante influencia en las ciudades que los albergan ya que son polos de atracción de trabajadores de alto poder adquisitivo, demandantes de áreas residenciales y servicios especiales.

Figura 92 a. Transformación de un espacio industrial. Ría de Bilbao	Figura 92 b. Parque Tecnológico de Málaga

3. Zonas residenciales. El uso residencial es el que más espacio ocupa en cualquier ciudad y perfectamente identificable al encontrarse segregado de otros usos, como el industrial. Las áreas residenciales de las ciudades se diferencian por su morfología y la composición socio-económica de sus habitantes. En algunas ciudades, como en EEUU, a estos factores se une el étnico, esto es, barrios diferenciados por la composición étnica o la procedencia de sus moradores (Litle Italy, Chinatown, etc.). Esto origina ciudades muy heterogéneas, un verdadero mosaico, en ocasiones, sin conexiones entre los diferentes sectores. De todas formas, el factor diferenciador más evidente es el económico, es decir, existen barrios de alto nivel socioeconómico localizados en emplazamientos agradables, con buenas condiciones medioambientales y bien comunicados y sectores de menor estatus socioeconómico situadas en áreas menos gratas (viviendas de mayor antigüedad y con problemas de deterioro, mayor contaminación ambiental, peor comunicadas ... ).

La segregación socioeconómica de la ciudad también esta marcada por la edad de sus habitantes. Los sectores de viviendas colectivas (centro) están habitados fundamentalmente por personas de edad avanzada, solteros y jóvenes parejas, debido a los escasos servicios que estas zonas ofrecen. Las familias con niños tienden a desplazarse a viviendas en el extrarradio de las ciudades (desarrollo de viviendas  unifamiliares).

Figura 93. Contraste de zonas residenciales. a9 Moraleja (Madrid), b) Barrio de las 3000 viviendas (Sevilla).

4. Sistema de transporte interno: Las líneas de transporte constituyen los ejes vertebradores de la ciudad. El desarrollo de ella siempre ha estado ligado al de los medios de transporte. Así, el ferrocarril, en la Revolución Industrial, y el automóvil en épocas más cercanas, han condicionado la evolución de la trama urbana, de la localización de la industria, las áreas residenciales, etc. Pero también los medios de transporte explican el desarrollo de la ciudad. Por ejemplo, la extensión del vehículo de transporte individual ha posibilitado la expansión de las ciudades por el territorio inmediato, dándose casos extremos como las ciudades norteamericanas. El entramado urbano, calles, se ha ido adaptando a estos medios de transporte, diseñándose vías de alta capacidad que unen grandes sectores de la ciudad y, jerárquicamente, otras de menor entidad que unen áreas internas en barrios y zonas residenciales. Actualmente, se tiende a favorecer la movilidad menos contaminante y limitar el acceso del tráfico rodado a determinadas áreas de la ciudad como son los centros históricos. 

Figura 94 a) Grandes avenidas en Parías	Figura 94 b. Calle peatonal en Copenhague (Dinamarca)=

5. Áreas verdes (parques, jardines): 

El sistema de espacios verdes incluye el conjunto de espacios públicos, parques, paseos, plazas, plazoletas, jardines, que sirven para la expansión recreación y pulmón de una ciudad. Se pueden clasificar estos espacios en función de su escala:

• De escala metropolitana: Grandes parques que abarca a más de un ciudad.
• De escala urbana: Grandes Parques incluidos dentro de una ciudad.
• De escala de barrio: Pequeñas plazas, plazoletas, o pequeños paseos.

Figura 95. Zonas verdes urbanas. a9 Central Park (Nueva York). b) Jardines de la Agricultura (Córdoba)

La importancia de tener espacios verdes en las ciudades está muy estudiada por la ciencia. entre los beneficios que aporta podemos citar:

• Disminuyen la violencia: Diversas investigaciones relacionan los comportamientos violentos con la carencias de estos lugares, proponiendo un paisaje urbano más verde para combatirla. 
• Aumenta la esperanza de vida: Desde un enfoque positivo, los entornos naturales fomentan la creatividad, las capacidades mentales y afectivas, por lo que las zonas verdes urbanas ayudarían a mejorar la longevidad y la calidad de vida de sus habitantes. Puesto que se ha demostrado que el contacto con la naturaleza beneficia a largo plazo.
• Deporte más saludable: Nadie discute la importancia de practicar deporte con regularidad y de evitar el sedentarismo. No obstante, investigaciones llevadas a cabo por especialistas de la Universidad australiana de Queensland han demostrado que practicar ese ejercicio en zonas verdes es mucho más beneficioso que hacerlo en otras zonas de la ciudad donde haya asfalto y coches.
• Mejora las relaciones sociales.
• Crea conciencia ecológica.

6ª Equipamiento urbano:

Podemos señalar como parte de la estructura urbana los equipamientos urbanos. Se entiende por equipamiento el conjunto de recursos e instalaciones cubiertas y/o libres, fijas o móviles, con distintas jerarquías y grados de complejidad, prestados por la ciudad u otros entres para satisfacer diferentes necesidades de la comunidad.

Los equipamientos puede clasificarse según:

• funciones: educativo, sanitario, administrativo, institucional, religioso, social, financiero, recreativo, deportivo, turístico, otros (que queden definidos por actividades diferentes de las residenciales o industriales). Tendríamos así guarderías, escuelas primarias, escuelas secundarios, institutos terciarios, hospitales, centros de salud, parroquias, municipalidades, etc.
• demanda, requerimiento de la cantidad de habitantes, tipo de población, edades, sexo, necesidades de salud, educación, administración etc. Espacios construidos y tributarios Estándares Capacidad y posibilidad de ampliación. Estado, vida útil remanente y grado de obsolescencia funcional y tecnológica. Características constructivas, funcionales, tecnológicas y tipológicas de los edificios e instalaciones.
• Radio de influencia: Según la cantidad de habitantes a los que sirve, tenemos algunos equipamientos singulares como los aeropuertos, municipalidades, catedral: son equipamientos únicos en un ciudad, y equipamientos en red, como escuelas, centros de salud, correos, etc.
• Ubicación/localización: en qué áreas o zonas se localicen, distinguimos entre servicios centrales, periféricos, de barrio, de distrito, etc.
• Frecuencia y tiempo de uso: diario, semanal, nocturno, mensual, etc. 

Figura 95. Equipamientos urbanos. a) Ciudad de la Justicia de Sevilla. b) Complejo Hospitalario de Navarra.

7. Soporte de Infraestructura:

Se entiende por infraestructura al conjunto de equipos e instalaciones que cumplen con la función de soporte y apoyo de las distintas actividades y que además, contribuyen al saneamiento e higiene urbanos.

Los tipos de infraestructura son los siguientes:

• Red de agua potable,
• desagües de residuos:: en red o por sistemas individuales
• Desagües pluviales: superficiales por calles o en red,
• Red de energía eléctrica domiciliaria,
• Alumbrado público,
• Gas: envasado o en red
• Teléfonos;
• Otras (como TV por cable, Intemet)

Figura 97 a. Visión general de la planta de tratamiento de aguas de Antwerpen-Zuid, situado en el sur de Amberes, Bélgica	Figura 97 b. Infraestructura de iluminación urbana.

A manera de resumen, incluimos un vídeo sobre la estructura interna de las ciudades.